11 de mayo de 2011

Grrrrrrr...

No sé si por nerd o por extra-influenciable, algunas de las "reglas" que me machacaron durante mi escolaridad quedaron inolvidablemente engrampadas en mi conciencia. Especialmente en lo relativo al lenguaje. Considerando que la mayor parte de mi escolaridad tuvo lugar durante la dictadura, a veces repaso algunos de aquellos viejos machaques para ver cuánto conllevaban de ideológico, y para terminar de sacudírmelos de encima, créase o no. Hoy, por ejemplo, volví a esta sentencia que supongo que al escolar actual le sonará surrealista: que no debe decirse (y muchísimo menos escribirse, so pena de amonestaciones) el verbo "agarrar"; porque agarrar agarran los animales, que tienen garras. ¿Acaso nosotros somos animales? Nosotros debemos decir "tomar".

Perdón, profesora, pero ¿no podríamos coger?

3 comentarios:

Pablo Wittner dijo...

Lo que es yo, nunca me dijeron eso de no decir "agarrar". Me parece que era una locura de tus maestras de la dictadura, sí. En democracia, se nos dejaba agarrar tranquilos.

Jorge Fondebrider dijo...

Cojer siempre se puede... Ah, pero vos te referías a "coger". No, eso sí que no. Queda feo.

Laura Wittner dijo...

ésa es otra que me parece que pertenece a generaciones antiguas como la nuestra: coJer para el sexo y coGer para agarrrrrar. yo unifiqué en la G hace poco.